sábado, 14 de junio de 2008

CEMENTERIO MEDIEVAL DE OSEJA

Tumba de lajas de Posada de Valdeón.
Enterramiento medieval.

En la Edad Media era habitual enterrar en el interior y en los alrededores de las iglesias. El clero y la nobleza tenían el privilegio de yacer dentro, de tal manera que cuanto más alto fuera el rango social del difunto, más cerca del altar habría de situarse su sepultura. El pueblo, en cambio, se enterraba fuera del templo, en su derredor.

En la tierra de Oseja conocida como La Cortina se encontraron hace algunos años varias inhumaciones medievales que, al no haber mediado excavación y al haberse vuelto a cubrir con tierra, allí deben permanecer todavía. Se trata, sin duda, del cementerio asociado a la antigua iglesia parroquial de Santa María de Oselia.

Las tumbas respondían a patrones de sepultura típicamente cristianos formados por cistas de lajas, es decir, una especie de ataúdes hechos con losas de piedra en forma rectangular. En la fotografía puede verse una de estas cistas, que pude observar y registrar durante los trabajos de cimentación del edificio de apartamentos que se levanta junto a la parroquia de Santa Eulalia en Posada de Valdeón.

Estas necrópolis son habituales en toda la zona y, por los casos excavados, sabemos que corresponden a sepulturas de los siglos VIII/X al XIII, que suelen caracterizarse por la ausencia de ajuares y que, como mucho, pueden proporcionar algún fragmento cerámico y algunas monedas que permiten la datación.

4 comentarios:

Anónimo dijo...

Muy interesante todo lo referente al cementerio Medieval de Oseja. Me pregunto ¿por que no se investiga el encontrado en la Cortina? ¿Es que no interesa a nadie o es que por algún motivo no se lleva a cabo? Sería muy interesante para el pueblo.

Anónimo dijo...

Hola Lourdes. A la vuelta de mi viaje, te contesto. Como bien sabes, La Cortina es propiedad privada y en gran medida una intervención arqueológica estaría supeditada a este condicionante. En casos similares, a veces se hacen excavaciones de urgencia para estudiar el yacimiento, extraer el material si aparece algo de interés histórico y volver a tapar para construir o para lo que sea. Así se hizo, por ejemplo, en Vegabaño o se hace con frecuencia en las ciudades. De nuevo, en esto, como en todo, dependemos de las autoridades. En Valdeón, se encontró de casualidad un cementerio medieval en Barrejo hace no mucho (el de la iglesia documentada de San Pedro de Barrejo), se excavó (creo) y se preparó para ser visitado. Encontraron otro también en Posada como digo en el blog y, en cambio, allí ni se excavó, ni se puso en valor. Se tapó y se construyó el edificio de apartamentos. Quizás eran otros tiempos o quizás existían otros intereses más importantes que la salvaguarda del patrimonio histórico y su puesta en valor. Estas cosas van cambiando con el tiempo, con las mentalidades y con las diferentes voluntades políticas. Lo cierto es que en Asturias se están excavando todos los cementerios de estas características que se están encontrando en distintos concejos porque, por su alta cronología, se están documentando periodos oscuros de la historia. En algunos casos, son cementerios de los siglos XII y XIII, en otros poseen cronologías de la época del Reino de Asturias. Las características morfológicas de las sepulturas son, en ambos casos, las mismas o muy semejantes. Los hallazgos materiales suelen ser muy pobres o inexistentes, pero la información histórica es muy interesante.

Anónimo dijo...

Muchas gracias por tu aclaración. Es verdad que nos tocaron otros tiempos muy duros en los que solo se pensaba en subsistir y gracias...De ahí el poco interés por el patrimonio cultural, no así porque fuéramos a la Escuela que tenían muy claro lo importante que era y no nos permitían faltar a pesar de que les hacíamos buena falta en el tiempo de las faenas del campo o con el gsnado...

Anónimo dijo...

Ciertamente, Lourdes. Voy a contestarte a esto en el Foro de Pedro. Lo considero una reflexión de interés.

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